FIESTA EN BALSAPINTADA
Domingo 23 de julio, fué el día señalado para el homenaje al camionero, dentro de las fiestas patronales de Balsapintada. Este pueblo situado en la comarca del Campo de Cartagena, combina su fuente principal de riqueza; la agricultura, con otra actividad a la que historicamente há estado ligado; el camión y su mundo.
Desde La Manga me dirigí a Balsapintada. Me había levantado temprano por culpa de un hormigueo que me hizo recordar aquel que precedía al 6 de enero en aquellos lejanos años y que apenas me dejó pegar ojo. La mañana apareció gris y cubierta, lo que podía ser indicación de alguna tormenta veraniega, nada mas lejos. A punto de coger el desvio para el pueblo, en plena autovía de Murcia, por el retrovisor ví los primeros rayos, por lo que el día estaría a la altura en lo meteorológico.
Estaba previsto inaugurar el recinto a las diez, por lo que hice tiempo en uno de los puntos fuertes habituales de concentración de camiones y ahí cayeron mis primeras fotos del día, dónde destacó un Troner 1337. A las 09.40 me dirigí a los Talleres de los Hnos. Conesa que se encuentran un par de kilómetros antes de llegar al pueblo. Veo a Paco y me dice que me dirija a la nave donde se guarda el mofletes y me dijo: "Vé que te vas a llevar una sorpresa", la sorpresa era un flamante 1060, aunque su matrícula dijera lo contrario. No me quiero entretener ahora en él, ya lo vereis en un post propio, porque el camión y su dueño; Pedro, se lo merecen.
Hago las primeras fotografías y unos pequeños videos, que Juan Manuel, pondrá mas adelante. Cojo el coche y me voy detrás del camión que con Paco al volante, se dirigía a su lugar de honor, pero......había que llenar ese depósito por lo que antes se hizo una primera parada en una gasolinera a la entrada del pueblo. Tras repostar, coge el volante Pedro y ahora sí, directo al recinto donde se celebraría la fiesta. No hace falta que os diga la espectación que causaba el camión a su paso y es que no era para menos.
LLegamos al recinto festivo y empezaron a hacerme "chiribitas" los ojos, mientras el mofletes a golpe de claxon entraba en el recinto festivo. En el margen derecho de la carretera veo un precioso Dodge Kew, al que por mi tierra llaman "Vaca seca", que descansaba sobre una góndola de la que tiraba un impresionante Ken negro. Formaban un conjunto indescriptible y que juro que las fotos no hacen toda la justicia, amigos. Hay que verlos, oir esos motores, ver cómo se movían, tocarlos....
Aparco el Mondeo y me voy a la fiesta. Gran ambiente; camiones, música, morcillas, pan del campo, simpatía y muchísimas personas. Balsapintada es un pueblo donde todos se conocen y forman una especie de familia, cosa que pude comprobar. Toda la mañana fué un ir y venir de camiones, reliquias, joyas al fin y al cabo que se compaginaban con unidades modernas que se mostraban, junto a diferentes productos como neumáticos, grúas, lubricantes, etc.
Gran fiesta y gran ambiente, que hubiera sido el marco perfecto para cualquier reunión de los amigos de via64. La mañana trascurrió muy rápida, se estaba agusto, conocí a muchas personas relacionadas con el camión, recopilé historias y fotografié todo lo que quise. Un verdadero lujo, al alcance de pocas personas, por lo que me considero muy afortunado.
Al filo de las dos del mediodía, me despedí de los hermanos Conesa y de mi tocayo Isidoro Ballester, seguidor del foro y que es el responsable de la restauración y reparación, de la parte mecánica del mofletes.
Vuelta a La Manga, muy poco tráfico por la autovía y muchos recuerdos en mi cabeza, los de esta misma mañana y todos aquellos que empezaron un día de mayo de 2.004.
Saludos desde Cartagena.
A punto de llegar...
Primeras fotos.
Miniaturas a escala 1/1
Una primera parada
"LLeno por favor..."
LLegamos...
...a donde teníamos que llegar