Impecable narración Manolo. E impecable reportaje el de tu Practika. Algo que hace tiempo dejó de ser novedad, a pesar de los muchos trienios que acumula la bendita cámara.
Y como quedó demostrado, todo un acierto el "ojo avizor" de Paco.
Bueno, días después retomo mi crónica.
Comentaba en mi anterior mensaje, que los de Cartagena intentaríamos no salir muy tarde ... Evidentemente no lo hicimos. Aunque nos despedimos ya de madrugada el día anterior, no podíamos (ni queríamos) irnos sin darnos un nuevo abrazo de despedida. El viaje que teníamos por delante era largo, sí, pero no podíamos marcharnos sin decir un último "hasta pronto" a Julián y a todos los que aún quedaban.
El domingo amaneció "de diez". Tras despacharnos del hotel, nos encaminamos de nuevo a Enériz. "Voces autorizadas", nos confirmaron que se estaba fraguando un pequeño almuerzo de despedida en el pueblo y más concretamente, en la Sociedad. Lo cierto es que, además de la gente de Enériz, seguían los segovianos, David, Mortadelo, Benito, Óscar y su familia, además de algún amigo más.
Lo cierto es que se fraguó un almuerzo de esos que hacen época. Y que, a pesar de que nuestro estómagos iban debidamente "pertrechados" tras el fin de semana, no nos pudimos negar.
Eso, sin contar que desde tierra charra, llegó un estupendo jamón, que estaba de chuparse los dedos. Javi demostró habilidad con la espada...
Aunque nuestro sin par Ángel, demostró igual soltura en esta suerte.
Óscar, no te pongas serio que esto en seguida lo solucionamos....
... no te lo dije. 
Tras el café, nos despedimos con un sincero abrazo. El tiempo, como siempre que se está a gusto, vuela. Pero había que ponerse en marcha sin más demora.
Las carreteras que dejamos el último lugar en la ida, eran, a la vuelta, las primeras que nos encontrábamos.
(Continuará ...  )
Saludos.
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Qué frágil es la memoria (o será la edad...), Manolo 
