Esta mañana fué de las que yo llamo
ANTOLOGICAS, acompañó la climatología y acompañó un buen amigo junto a su formidable Leyland Beaver.
El camión ya lo conoceis, pero a Ginés Hernández su dueño, no. Así que vamos a empezar por ahí. Ginés es una persona que ha llevado esta profesión en la sangre desde que nació. Su padre, profesional de la carretera, condujo camiones que el solo oirlos nombrar emociona; Mack, Leyland Beaver, FIAT, Dodge, mofletes.....El caso es que desde niño ha estado subido en una cabina y aprendido todo lo necesario para desenvolverse perfectamente desde bien pronto.
Nuestro amigo unió profesión y pasión, este Beaver y el Comet F-90, que ya visteis, hablan claramente de ello. Ginés respira actividad, por lo que os aseguro que aquí no quedará la cosa y a los "dos ingleses" se les unirán algún camión mas bien pronto. Os tengo que aclarar que Ginés es pegasista hasta la médula.
No adelantemos acontecimientos y ya se verá. Os dejo un pequeño reportaje de esta mañana, en la que supe la sensación que produce ir en esa cabina, oir ese ralentí que tanto recordaba, escuchar y ver esos cambios, y disfrutar de la compañia de un amigo.
Saludos desde Cartagena.
Calentando el motor.
Nuevo embellecedor del buje
Optica original
Mandos