. Las miniaturas no tienen derechos de autor, por lo menos con ese nombre. El proyecto y desarrollo (no la fabricación) pueden tener un registro de la propiedad intelectual. La fabricación y por tanto el modelo terminado, se rigen por el registro y patentes industriales, que no tienen por que ser del modelo completo, y afectar a una o varias de sus piezas, a los sistemas o soluciones empleados, al propio proceso, al ensamblaje, a la pintura y decoración, al estuchado y a cualquier otra característica del producto. Lo que no puede registrarse en beneficio propio, son las generalidades. No puede registrarse que las ruedas de las miniaturas sean redondas, pero si el tipo de ajuste entre llanta y neumático, o entre rueda y eje (por ejemplo). Por supuesto que los fabricantes de miniaturas deben tener los permisos para reproducir sus modelos, de los fabricantes reales. En unos casos se conceden de forma gratuita y otras mediante un canon, muy variable. La aplicación de todo esto, se rige por normas nacionales e internacionales, al igual que se puede registrar o patentar en uno o más países. El hacer piezas en resina o cualquier otro material, de un modelo comercial con fines particulares, no contraviene ninguna ley. Lo que evidentemente no se puede hacer, es comerciar con dichas copias, aunque no sean idénticas a la original, diferencia entre la falsificación y la imitación. Todo esto es teoría. La práctica suele diferir bastante.
Saludos,
Miguel .
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