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La verdad es que hace sólo un par de días que descubrí ese foro y de casualidad.
He visitado exclusivamente el tema de los portacoches y sólo dos terceras partes de sus 21 páginas.
La conjunción de modelos de competición y los industriales que los transportan o prestan apoyo, me apasiona. Es un “matrimonio” perfecto para mi gusto,
tanto a escala real como en miniatura.
Mi última adquisición en este terreno, ha sido la réplica del “1954 Twin Fageol Super Freighter” que usaba el equipo Cunningham (otra de mis pasiones
ocultas…), para desplazar sus coches a los circuitos.
Su fabricante en escala 1/43 es un artesano ruso y la serie está limitada a 100 ejemplares, lo que encarece algo el precio a cambio de un modelo
magníficamente montado y pintado, aunque también se puede comprar en kit.
El de la foto (cogida de la red) es idéntico al mío, pero no es el mío.
Respecto al Bacalao y su temporada de 1968, queda casi todo dicho, recordando que el otro monoplaza de Alex Soler-Roig llevaba en el III G.P. de
Barcelona de F-2 (Montjuich, 31-03-1968) el dorsal 17.
Bagratión logró finalizar la prueba en el octavo (y último) lugar, mientras que Soler-Roig debió retirarse con la dirección del monoplaza doblada, tras
un “toque” con Brian Redman.
La carrera la ganó Jackie Stewart, seguido de Henri Pescarolo (ambos con MATRA MS7) y tercero Chris Amon (Ferrari Dino 206).
En aquella época, muchos constructores (y por tanto pilotos) hacían doblete con la F-1 y F-2, encontrándonos en aquella parrilla de salida con nombres
tan conocidos como los antedichos, Piers Courage, Jackie Oliver, Alan Rees, Guy Ligier, Brian Redman, Jochen Rindt, Jean Pierre Beltoise, Graham Hill,
Jo Schlesser, Clay Regazzoni, Jacky Ickx y Jim Clark.
Vamos, que aparte de los españoles (que tampoco eran unos desconocidos y uno de ellos incluso Príncipe…) y cuatro comparsas la carrera era “de campanillas”,
eso sin contar con la ausencia (lesionado) de Andrea de Adamich o Derek Bell y Chris Lambert, que no tenían motor de recambio para sus coches, tras romperlos
en entrenamientos.
La postal la compré contemporánea casi a la carrera (junto con otras de la misma prueba, editadas por “Vikingo”), pero hasta muchos años después no
reparé en que allí aparecía el añorado Bacalao.
En la parte derecha de la foto, se ve el Alfa Romeo con placa del CD (Cuerpo Diplomático), que usaba el Príncipe Jorge de Bagratión y Mukrani.
Disculpar por el “rollo”, pero cuando alguien habla de lo que le gusta, ya se sabe…
Un saludo,
Miguel
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